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sábado, 9 de abril de 2011

Al otro día…

- Buenos días, Dra. Sofía, ¿Cómo Amanece?- dijo su secretaria con algo de nervios y destemplanza mientras colocaba un café en el escritorio.
- Buenos Días Luz, amanecí bien gracias y ¿Ud?-
- Bien, Gracias. Mire Dra. le hago entrega de los casos procesados por intento de homicidio, y los cuales están en proceso de apelación. La Dra. Isabel le pide el favor que se haga cargo de estos, y que le hagas el respectivo seguimiento. Hay unos casos en los cuales tiene que dar un diagnostico psicológico. Esos son los que requieren más urgencia.-
- ¿Te puedo pedir un favor?-
- ¡Claro!. Dígame -
- No me coloques el titulo de Dra., le tengo pánico a la sangre. Dime solo Sofía-
- Como diga Srta. Sofía- Luz…guardo silencio mientras fijaba su mirada en Sofía…

Ella al darse cuenta…

- Eh… ¿Quieres decirme algo?-
- No… o… Bueno si… Pero…-
- Solo… ¡Dime y ya!-
- Con respecto a… anoche…-
- Mmm… Anoche… Luz, el día de ayer solo tuve una cena con unos viejos amigos, creo que no recuerdo que hayas estado ahí…- dijo en son de cómplice – o… ¿Si?-

Luz sonrió, comprendió que Sofía guardaría “el secreto” y no diría nada.

Después de ello Sofía, empezó a revisar caso por caso, uno a uno los examinaba los cuales se hacían más interesantes para ella.

Así paso el medio día, sin salir de su oficina, analizaba cada expediente, cada detalle sin dejar pasar ni uno solo. Era una excelente profesional y por ello era estricta en su labor.

Se llegó la 13:00 y ella aun en su oficina, así que quiso darse un merecido descanso, dio un alto a su actividad laboral, y bajo en busca de su almuerzo.

Ya devuelta a su trabajo, muy puntual, pues casi nadie había llegado. Ella prosiguió a su oficina al abrir la puerta algo extraño noto…

martes, 23 de noviembre de 2010

Al oír esto ambos, Raúl y Estela, quedaron sin palabras.

- Sofía es una chica fuerte- Dijo Raúl.
- Y mal educada- Dijo estela en tono descortés.
- No, no es mal educada. Siempre ha sido independiente. No te sientas ofendida-
- Me preocupo por ella, o bueno, nos preocupamos y mira, salimos regañados-

Raúl sonrió. Tomo su mano y con cariño busco su boca, la beso.

Sofía, mientras tanto, daba un paseo por un hermoso prado, iluminado, lleno de hermosas rosas, pues tomaba un poco de aire para tratar de olvidar el acontecimiento reciente.

Ya, más calmada se dirigió al baño. La puerta estaba entreabierta, notaba un ruido extraño; sigilosamente se asomo, sin entrar completamente… sus ojos no podían creer lo que estaba viendo, Luz y Mariana, sus cuerpos estaban entrelazados, sus labios demostraban más que una amistad, la pasión desbordada entre ambas no se podía cuantificar, el amor y el deseo ambas era indescriptible e indescifrable, era incalculable ese sentir desbordado entre ellas, las manos de Adriana recorrían el cuerpo, el vestir de su amada, y sus labios se impregnaban de su piel…

- Sofía, ¿dónde estabas?, te he estado buscando…-

Inmediatamente el placer de las dos jóvenes freno…. Sus corazones se agitaron y Sofía cerro completamente la puerta.

- Ya estoy bien, no te preocupes, solo estuve por el Jardin, tomando un poco de aire fresco-
-¡El sereno te puede hacer daño!-
- Si…Quizás, pero ya me siento mucho mejor-
- Ah... ¡Bueno!... Y ¿Vas a entrar?-
- ¿A dónde?-
- ¡Al baño!... ¡Ven! ¡te acompaño!-

- No. Mejor no… Vamos que Raúl estará impaciente- Dijo Sofía mientras la tomaba amistosamente por su cintura para ir a la mesa.
- ¡Bien!-

jueves, 15 de abril de 2010

El camino se hizo corto así que pronto llegaron donde Estela la novia de Raúl; él muy cortésmente las presento.

- Mucho gusto Estela, Soy Sofía-
- Un placer Sofía-

Sofía… Bastaba verla para que se quedaran los ojos en ella, estaba hermosísima portaba un vestido blanco hasta la hasta rodilla, la hacía ver como un ángel, impregnada y llena de belleza Celestial, sus mejillas rojas y sus labios con un labial que apenas hacían darle un pequeño brillo, pues el brillo ya lo poseía, ya era dueña de él, él la aclamaba como poseedora, como su propietaria absoluta, pues se sentía orgulloso de acompañarla…

Por otra parte, Estela, una joven de familia humilde, muy inteligente y de un gran corazón. Era una chica de 19 años, de estatura mediana, 1.65cm, cabello rizado largo. Era una morena preciosa, cara delgada, ojos color negro, una sonrisa intimidadora y coqueta, elegante, bien definida, decidida de sí misma y muy segura de su actuar.
Ambas simpatizaron muy bien. Por el camino mientras Raúl manejaba sostuvieron una conversación muy agradable para los tres.

Pronto llegaron al sitio donde iban a cenar. Tranquilo, pasivo, sin bullicio, sin contaminación. Era algo un poco particular, algo bello y natural; a las afueras de la ciudad, con el mormullo de la noche y la luz de la luna. Solo unas cuantas mesas se podían divisar en la primera sala y en el fondo, después de la cocina, una segunda sala, algo cómodo, muy cortes y elegante. Raúl encantado de darse el gusto de cenar con sus dos hermosas amadas estaba feliz, la dicha lo invadía y se hacía presente en su rostro.

Muy amable y muy cordial pidió una cena específica que había mandado a hacer para sus invitadas especiales. Tanto Sofía como Estela quedaron sorprendidas.

- Esto esta delicioso, Amor- Dijo Estela degustando el plato.
- Si Raúl…mmmm… Te estás luciendo- Dijo Sofía confirmándolo,
- Gracias-

La conversa giro entorno a los estudios de Raúl, a la vida de Estela, y al nuevo trabajo de Sofía…

- Mañana va hacer mi primer día de trabajo en la Fiscalía; estoy tan ansiosa de empezar que ya me veo desempeñando el cargo-
- Me alegra por ti Sofía- Dijo Estela.
- Si… Pues la verdad…mmmm…- La cara de Sofía se torno pálida, su habla se fue, sus ojos cerraron, perdieron el brillo de la realidad, y el ser consciente de su alrededor se torno tenue e inestable.
- Sofía... ¿Que pasa…?-Dijo Raúl mientras la acogía en sus brazos.

Sofía se había desmayado, estaba inconsciente. Estela inmediatamente salió en busca de un vaso con agua y alcohol y al momento llego. La demás gente curioseaba lo sucedido, mientras tanto Raúl y Estela trataban de hacerle recobrar el conocimiento. Unos dos minutos después Sofía volvía en sí.

- ¿Estás bien?- Pregunto Raúl entono de preocupación.
- Si. Es solo un mareo, hoy tuve un día bastante fuerte.-
- Sofía es mejor llevarte al hospital-Sugirió Estela
- No, no te preocupes estoy Bien.-

Estaba pálida, apenas podía hablar. Con las pocas fuerzas que tenia, se levanto.

- Voy al baño, ya vuelvo-
- ¡Te acompaño!- dijo Estela
- No, Gracias, Voy sola, enserio estoy bien.

domingo, 14 de marzo de 2010

Después del buen recibimiento por parte de su nueva Jefe, Sofía, no perdió tiempo y se acomodo en su oficina; en compañía de Luz quien le ayudo a ordenar, para que quedara de la mejor manera. Antes de salir al almuerzo se dio la presentación de Sofía ante el grupo de trabajo. A todos agrado que ella hiciera parte de dicha área.

Eran las cinco de la tarde, Sofía llegaba a casa. Pudo observar que sus padres ya estaban así que se apresuro al encuentro.

- ¿Cómo están los padres más lindos y hermosos del mundo?- Dijo Sofía mientras saludaba a su madre y se acomodaba en el canto del señor Max.
- Muy bien mi niña preciosa-
- ¿Cómo les fue? ¿Muchas tesis?-

- Muy bien cariño, y si bastantes, vengo agotado… Pero… ¡Cuéntanos!..¿Cómo te fue? ¿Conseguiste el trabajo?
- Mmmm… Si… La Doctora Isabel fue muy amable y cortes. Además supo del caso de mama, y me dio las felicitaciones-
- Me alegra mucho por ti hija-dijo su madre mientras le daba un beso en la mejilla.

Hubo un momento de dialogo en familia entre los tres para comentar cada uno de sus vivencias en el poco tiempo de separación. Fueron muchas las experiencias por parte de todos.

Como a la hora Sofía subió a su cuarto para alistarse, pues tenía una cita con Raúl y su novia.

A las 7:00pm estaba Raúl en la sala, esperándola.

- ¡Qué hermosa estas!- Dijo Raúl mientras contemplaba a Sofía bajando por las escaleras
- Gracias por tu alago-
- Mi niña- interrumpió Teresa- pasaste por…-
- Si nana, por eso me demoré y llegue un poco tarde-
- Y… ¿Que te dijo?-
- Que había que tener paciencia, pero que, hasta el momento vamos muy bien-

Raúl no comprendió de quien y de que se hablaba, quiso indagar el tema con Sofía pero ella lo ignoró.

miércoles, 10 de febrero de 2010

- Buenos días Doctora-
- Buenos Días Sofía, Mucho gusto Isabel Barrera, es un placer conocerte-
- Gracias, el gusto es mío-
- Quieres tomar algo-
- No, gracias ya me ofrecieron café, muy amable-
- Bueno. Haber te comento Sofía: el trabajo que se lleva acá es de suma importancia, pues ya conoces cada evento que se presenta y pasa por esta área, además de eso el contacto con el INPEC y el DAS, hacen que se tenga una gran responsabilidad y así mismo un gran compromiso. El avance y objetivos que alcanzaste en los diversos grupos de investigación cuando estabas en la universidad fueron sin duda de una alta calidad, que a mi parecer un profesional tarda mucho en lograrlos, es por eso que se que vas a dar lo mejor de ti y que no me vas a defraudar. Vas a tener un periodo de prueba de 15 días. Empezarías mañana pues hoy seria para que te ubicaras y organizaras. Mira este es tu manual de funciones- dijo mientras le entregaba un pequeño libro- Ah se me olvidaba, afuera esta Luz, creo que ya la conoces, ella te va a ubicar en tu oficina, además de ello, ella va a estar a tu disposición en lo que quieras, ósea en otras palabras Luz es secretaria compartida. Y bueno lo único que me resta es decirte Bienvenida.
- ¡Gracias! Muy amable.
- Cualquier duda o pregunta no dudes en consultármelo.
- Gracias Doctora.

Isabel Barrera una mujer con muchos créditos de experiencia, según se podía observar en rededor a su despacho. Era una mujer de aproximadamente 40 años, elegante, bella, deseada, con un carácter bien definido, amable, cordial, humilde, decorosa, pero a la vez era estricta, rígida y precisa… Todos, en el trabajo, la admiraban y le tenían mucho respeto; pues a pesar de que tuvo una hija de una edad muy temprana, supo enfrentar la vida con valor y fortaleza, sin el apoyo ni siquiera de sus padres, pues aun ellos cuando supieron que estaba embarazada le dieron la espalda, a pesar del buen estrato económico que poseían le quitaron todo tipo de ayuda. Era una mujer que le gustaba que se hicieran las cosas al derecho, en su punto y sin desigualdades.

jueves, 21 de enero de 2010

- Mira aquí te dejo el archivo que mando pedir mi madre- acentuó Mariana con rabia y malgenio.-

Luz guardo silencio… Pudo observar en los ojos de Mariana el coraje que la invadía así que prefirió callar y no agrandar las cosas…

- Sofía, por favor toma asiento, ¿deseas algo de tomar?- pregunto Mariana de una manera cordial.
- Un Café por favor.-
- Ok! Vuelvo en seguida. Luz, ¿me puedes acompañar?-

Luz, al escuchar a Mariana solo corrió su sillón y fue tras ella. Sofía, no comprendía lo que pasaba, estaba tan confundida, “¿las palabras de Luz? ¿La reacción de Mariana?” Eran enigmas difíciles de explicar, “sus actuares son pilares de recelo… Pero no, eso no puede ser, me estoy apresurando en las conclusiones” (pensó). Así que decidió dejar sus prejuicios y estudios en un “no más”


- No se tú que estas pensando de mí para que actúes de esa manera, yo te pido, por favor, que tengas precaución en tu actuar y en tu juzgar predeterminadamente. Luz a mi me parece que te he demostrado que Te Quiero y que eres importante en mi vida. Por favor no mas celos, ya habíamos hablado de eso-
- Tienes razón… ¡¡¡Perdóname!!!...-
contesto Luz siendo consciente que había procedido mal- ¿si me perdonas?-prosiguió mientras acariciaba la cara de su amada.- Perdona a esta loca de amor por ti ¿Sí?-continuo
- ¡Bueno!- Contesto Mariana difundiéndose una sonrisa en su cara-¡No te preocupes!-y en un pequeño beso se pudo olvidar aquella discordia.

Allí estaban dos chicas, Adriana y Luz, ambas sostenían una relación clandestina desde hacía ya siete meses, ambas se gustaban tanto como el primer día, la una “moría” por la otra, ellas enamoradas demostraban su amor en secreto, como muchas otras, su pasión se desbordaba en cada beso, en cada caricia, en cada detalle… Ambas sabían que su Amor era prohibido pero no les importaba, el riesgo era amar, amar sin límites sin atañer que eran iguales, tanto la una como la otra sentían ese sentimiento que no se le podía decir “¡No!” sino que simplemente mandaba en el corazón de aquellas hermosas doncellas.

Mientras esperaba el café, Sofía observaba las instalaciones de dicha oficina y aprovecho para ir al baño. Ya devuelta sentada en la sala de espera observo como la empleada de cafetería, según lo indicaba su uniforme, se acercaba a ella, era una señora de estatura baja, de aproximadamente 36 años…

Recibió su café y prosiguió a tomarlo… A los pocos minutos, Luz y Mariana asomaban por la puerta de la oficina central, la de la Doctora “Isabel Barrera”.

- Sofía, sigue, mi madre quiere verte- dijo Mariana.
- ¡Gracias!-

viernes, 15 de enero de 2010

- ¡Espera! ¡Por favor!- dijo mientras se deslizaba por las forzosas puertas que trataban de cerrarse-¡uuufff! ¡casi no alcanzo!- replicó ya estando dentro brindando una tierna risa en son de "Hola"-

Sofía sonrió, le causo gracia lo “embrollada” que estaba, llena de libros y carpetas los cuales solo hacían que se viera su dulce y angelical cara, vestía un pantalón café entubado y una camisa color blanco semi escotada, unas botas elegantes y sexys hacía que le diera un estilo diferente y un poco casual.

- ¿Tienes Afán?- pregunto Sofía.
- Un poco, soy muy relajada pero otros ¡no! Y entonces sufro las consecuencias de sus arranques y desesperos…- Dijo mientras acomodaba unas carpetas debajo de su brazo
- ¿y a que piso vas?-
- Al séptimo por favor… Y ¿tu?-
- ¡Casualidades! Al mismo-
- Qué bien comenzamos…

El ascensor cogió su rumbo, Sofía se sentía intimidada con la mirada de la chica que constantemente cruzaba su vista de arriba abajo, no era de desconfianza, era de interés, pero… ¿en qué?... Entonces la joven pudo notarlo y cambio su percepción, se sintió mal, supo que quizás estaba equivocada, una sonrisa fragmentada en su rostro disimulo lo acontecido, y ahora la azorada era ella, estando en ese achaque de nerviosismo sus manos dieron paso a un desborde de hojas y carpetas que en segundos rodaron por el suelo…

- Ups- susurro-

Sofía no pronuncio palabra alguna sino simplemente se agacho para ayudar a recoger.

- Gracias- replico su acompañante-
- Con el mayor de los gustos-
contesto Sofía

Unos segundos después, ya recogido todo...

- ¡Uy! Qué acto de mala educación, aun no me he presentado. Mucho gusto mi nombre es Mariana Toar-
- El gusto es mío Mariana, soy Sofía-
- ¿Sofía?-
- Si, Sofía Castaño-
- Un placer conocerte, leí el caso que ganaste en Abril a la Editorial Serenidad, mi madre se impresiono tanto al ver a que una recién egresada lograra ello. ¿me imagino que vienes a lo del trabajo?...
- Sí-
- Ese puesto es tuyo, te lo aseguró… Mi madre es la jefe del área de Psicología Jurídica, y por ella es que estoy aquí, esa es la vieja que me apresura, que a veces me vuelve loca-
- mmmm… Pero veo que a pesar de todo le tienes paciencia
- comento Sofía-
- Sí… Pero en fin Sofía, para mi es un gran placer conocerte, eres como te soñé-
- ¿te soñé?
- Sí, no te molestes, como lei sobre el caso que ganaste, pues me imaginé una mujer muy intelectual, atractiva, decidida de sí misma, y por supuesto Hermosa… Y mira no me equivoque…-
- Gracias-

Un clip de sonido irrumpió la conversa, habían llegado al séptimo piso, las puertas del elevador se abrieron, Mariana salió adelante y le siguió Sofía, el personal que estaba laborando vio llegar a las dos jóvenes, entonces como por dos segundos se escucho silencio...

- Ven, sígueme- dijo Mariana-
- Gracias-

Cada cual hizo que seguía con su trabajo, el interés en Sofía era evidente, y ella lo pudo notar.

Era un recinto amplio, al salir del ascensor se podía observar cuatro dimensiones, dos de cada lado, aproximadamente ocho empleados hacían parte de aquella dependencia. En el fondo la oficina mayor, la de la “Jefe”. Se podía apreciar, una mujer elegante, de más o menos 26 años, estatura baja, morena, ojos verdes; era la secretaria…

- Hola Luz, buenos días, ¿Cómo amaneces?- Dijo Mariana.
- Pues bien, pero no tan bien como usted- replico en tono de desacredito por la presencia Sofía-

Mariana deseó que la tierra se abriese en ese preciso momento y la tragase, se sintió muy achantada por la respuesta de Luz, sabía que los celos la invadían, pero no pensó que llegase a ese actuar por algo tan estúpido.

miércoles, 13 de enero de 2010

"Sentir Prohibido" Una historia basada en la vida real...

Haciendo una pausa de nuestra historia, os invitado a todos vosotros a que visiteis "Sentir Prohibido".
Esta e una historia basada en la vida real, que quiero compartir con todos vosotros, espero vustro visita...

P.D:
Logico! una historia Lesbica, no os preocupeis, ni sintais aburrimiento en dar ese clic, no es en vano...


Besos...!!!...

lunes, 11 de enero de 2010

Decidida de sí misma y de saber que a partir de ese momento comenzaría una nueva etapa llena de perseverancia y éxito salió del auto Resuelta a escuchar un “Sí” para la vacante de “Asesora en el área de Psicología Jurídica”. Caminó de frente hacia el edificio de la Fiscalía observando los ocho pisos que la componían, y viéndose en un mañana en su nuevo puesto de trabajo.

Un Hombre ya de edad, unos 50 años, rondaba la entrada y salida del personal de dicha entidad.

- Buenos Días, Disculpa, en que piso puedo encontrar la oficina de “Psicología Jurídica”- Preguntó al portero.
- ¿La señorita viene a la entrevista?- Curioseó intimidando a la joven con una suspicaz desconfianza.
- Si Señor- Respondió con una fija mirada a los ojos del individuo-
- Muy bien, un momento la anunció, y me permite su bolso para la posterior requisa-
- Con gusto-

Sofía presento sus papeles y después de unos cinco minutos de espera se acerco el Portero…

- ¿Todo en orden?- se adelanto la joven a preguntar-
- Si señorita Sofía, todo muy bien. Mucho gusto Joaquín- dijo mientras le entregaba el Bolso.
- Mucho gusto Joaquín, Sofía-
- Siga por favor- Dijo mientras le abría la puerta- siga derecho- prosiguió indicándole-en el fondo después de la cafetería encontrara el ascensor, la oficina queda en el séptimo piso. Bienvenida-
- Gracias, muy amable.- Dijo con una humilde sonrisa.
- Un placer y mucha suerte-
- Gracias- “Aunque no creo en ella” (pensó)

Sofía subió al ascensor imaginaba las oficinas, imaginaba la persona quien la entrevistaría, imaginaba los procesos, los miles de casos que se trataban… Estaba nerviosa, su cuerpo alterado, sus manos sudaban, y el calor la invadía, por un momento dudo de sus capacidades, pero recordó el caso, de algunos dos meses atrás, caso que había fallado a favor de su madre y eso le hizo sentar sus capacidades. Presiono el número siete para que la llevara a la oficina, las puertas del ascensor se estaban cerrando cuando en ese momento unas manos delicadas estropearon el ciclo de cierre, apareció una joven hermosa de aproximadamente unos veinte años, alta, delgada, cara bien definida, unos labios muy llamativos, ojos color negro, al igual que su cabello liso…Era verdaderamente atractiva…

viernes, 8 de enero de 2010

- ¡Buenos días niña! ¿Cómo amanece?- Al otro lado del teléfono la voz de Teresa -
- Bien Nana ¿y tú?
- Un poco mal mi niña… ¿Porqué lo de anoche? ¿Quién te hizo llorar hermosa?-
- Nadie Nana, Nadie…-
- ¡Ha! ¿Entonces?-
- Tú sabes más que nadie que es lo que me aflige… Es solo eso-
- Ah! Mi niña no te preocupes que eso va a pasar ya lo veras…
- No creo Nana-
- Pues, Sofía, yo sí creo… Alguna vez te he quedado mal o te he mentido… ¡No! Nunca siempre he tenido la razón y te he cumplido lo que te he dicho…
- Si Nana pero esto es diferente-
su voz se escuchaba entre cortado, apenas podía responder…

- No lo es mi niña, no lo es…-
y una lágrima broto de los ojos de Teresa, deslizándose por sus mejillas.

Teresa sabía que Sofía tenía razón, pero de una u otra manera el pesimismo no podía invadir su vida ni mucho menos la de Sofía, el secreto que ambas guardaban era terrible, y si sus patrones llegasen a saber, podría, literalmente, “matarlos en vida”.

- Bueno mi niña, y que tal con la entrevista de trabajo, ¿ya saliste de ella?
- ¡No! ¡Aun no! Hasta ahora voy a entrar.
- Te deseo mucha suerte, sé que ese puesto va hacer tuyo, ¡lo sé!
- Gracias, aunque sabes que no creo en la suerte, pero bueno, Nana dale saludos a mis padres… ¿Siempre llegan hoy?
- ¡Sí!
- ¡Bueno! ¡Feliz día!


Sofía se quedo en el carro, meditaba sobre la conversación con Teresa. La joven, a pesar de que estaba mal por dicha situación, que jamás espero que llegase a ella, tenía claro que debía luchar y no dejarse vencer, por el contrario ganar ese nuevo conflicto y desafío que la estaba acogiendo, y estaba haciendo que su vida se fuera al piso… Ella siempre fue de la ideología del “positivismo” pero, su presente la estaba llevando al “pesimismo”, es así que ese mismo día se reto a ella misma, reto que debía ganar, como siempre un reto por cumplir y llegar al final triunfante...

jueves, 7 de enero de 2010

Ella no imaginaba que Raúl llegara a esos extremos, llevaban seis meses que no se hablaban, el orgullo de éste era uno de sus patrones característicos, por lo que Sofía no podía creer a lo que sus ojos veían.

Un risa burlesca pero de admiración se infundio en su cara.

-No fue nada, solo dijiste lo que sentías o el concepto que tenias de mí, que espero que ya haya cambiado, no te preocupes- y le acogió en un fuerte abrazo- solo te pido que a la vuelta sea en privado no a la luz de la gente, eso fue lo que me molesto y mucho, pero fresco todos tenemos errores-

Sí Sofía había quedado perpleja, pues imagínense Raúl, estaba atónito. Por muchas semanas ensayo esas palabras para esperar la mejor reacción de parte de ella, y en realidad no sabía si había servido o no.

Después de esas palabras y ese fraternal abrazo y de acomodar las rosas en la parte trasera del auto, Sofía “encendió los motores” (del carro), Mientras ella conducía Raúl le comentaba sobre sus excelentes calificaciones de la universidad y su actual relación sentimental con una joven de su misma carrera “Sociología”. Sofía le agrado mucho esto, deseándole lo mejor en ello.

- Sofí, me gustaría mucho que me dieras el visto bueno sobre mi actual relación, pues haber como te parece, tu sabes que Te Quiero Mucho y siempre te he considerado como una hermana-
- ¡Claro! Nada más es que digas cuando y donde… -
- ¿Qué te parece esta noche?-
- Ok! Perfecto, paso por ti y vamos por tu novia. ¿te parece?-
- ¡Perfecto!-


La cita quedo planeada, a Sofía le intrigaba qué mujer hacia que a Raúl le brillará los ojos, el corazón y hasta el alma. Sabía que no podía faltar a esa cita.
Pronto se llego al destino que pidió Raúl, la avenida principal.

- Como lo pidió el señor, la “avenida principal”-
- Gracias Sofí, y mejor yo paso por tu casa a las 7:00pm-
- Ok! Como quieras...Entonces te espero-


Con un beso en la mejilla se despidieron aquellos “dos locos” que a pesar de que hubo indiferencia por cierto tiempo se querían como buenos e inseparables amigos, y una muestra de ello era lo que había acontecido meses atrás, quedando eso en el pasado, olvidando y dando paso a la reconciliación y el no rencor por parte de ambos.

Ya eran las 7:30 de la mañana estaba estacionando el carro en el parqueadero de la fiscalía, lugar donde tenía la entrevista laboral…cuando…. Sonó su celular… Era de su casa…

sábado, 2 de enero de 2010

-Sofía, espera échame un “aventón” hasta la Avenida-

Era su ex novio, Raúl, hacia poco habían terminado, la relación se dio de baja después de tres meses.

Sin dudarlo Sofía accedió al favor de su gran amigo, antes novio.

Se conocían desde niños, ambos cursaron parte de la secundaria, pero Raúl, un poco descomplicado y desinteresado en el estudio, se dejo quedar unos años. Raúl era un chico de 22 años delgado, de labios gruesos, ojos azules, cabello rubio, piel trigueña, y estatura 1.70 cm. El siempre le gustaba ser el “show” de los eventos por insignificantes que fueran, y precisamente en eso era que habían entablado esa buena relación que los condujo a un tiempo sentimental pero que no se dio por sus impulsos desenfrenados.

Entraron en el automóvil y ambos estaban intimidados por las circunstancias del pasado, sobre todo Raúl, en quien recaía el peso del fracaso sentimental.
Sofía estaba introduciendo la llave en el coche para encenderlo cuando…

- Sofía yo se que, la última vez que hablamos, bueno! discutí contigo, no fue de buen agrado, por eso te traje esto- Raúl sacó un hermoso ramillete de rosas- y por favor recíbelo.-

miércoles, 30 de diciembre de 2009

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........MESES ATRÁS........

La relación con el chico, que creía el hombre de sus sueños iba en el mejor momento. Pero… Él comenzó a pedirle una cita a solas en su apartamento, Sofía detestaba eso, por razones ajenas a su sentir, es por esto que su amado explotaba en furia al escuchar un “¡No!” por respuesta.

En una de sus citas, en la cafetería de la universidad, mientras ella le explicaba un trabajo, él le tocó el tema y de nuevo le insistió, Sofía, lo miro a los ojos y serena pero airadamente respondió:

- Para mí una cita en tu Apartamento es acceder, de una forma muy indirecta, a acostarme contigo, y discúlpame pero yo no voy a tener relaciones con vos porque aun no me nace. ¡Bueno! Se cuando iniciar una vida sexual responsable y aun no estoy preparada. ¿Sera que me puedes entender?-

Él guardo silencio y después de unos cuantos segundos se levanto de la mesa, miro alrededor y volviéndose a Sofía, de una forma grotesca y arbitraria dijo:

- ¿Sabes qué? Eres una niña presumida, hija de “papi y mami” que se siente dueña y señora de todas las cosas. Y si crees que no te doy estabilidad emocional, porque la “virgencita” se siente azorada; ¿Para qué sigues conmigo? Adelante vete! Las puertas están abiertas.-

El silencio invadió aquel recinto.

Asombro y achante se observo en los ojos de la joven, su mirada se fijo alrededor, el susurro de los demás, compañeros, profesores y trabajadores fue evidente. Sofía solo agacho su cara y con una triste y decepcionante fijación visual en su, hasta ese momento, novio dijo:

- ¡Lo siento por ti!-

Ella salió de aquel lugar lo más rápido que sus pasos dieron… Y él, confundido, entre cortado solo pronunció:

- Sofía, Espera…- mientras trataba de buscar la mano de su amada-

Solo pudo ver como imprudentemente y sin justa razón la había “embarrado” (estropear); él joven sintió que el mundo se le venía encima, la popularidad de Sofía y así mismo su reputación era intachable a nivel general de la universidad por lo cual sabía que esas palabras le iban a salir caras (de caro).
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lunes, 28 de diciembre de 2009

Parte II

Después de una larga tarde en el Puerto Principal de la ciudad, donde Sofía meditó acerca de su vida, ella llego a casa. Tac, tac, tac, llamo al portón sin pronunciarse por la bocina para anunciarse, como era de costumbre, desde que no llevará su carro, saludando desde allí hasta el “perro de la casa”; se acerco Teresa, la ama de llaves a abrirle, cuando se sorprendió al ver el rostro de su pupila sollozo sin conocer causa alguna, entonces angustiada pregunto el porqué de esa situación, pero lo que encontró como respuesta fue un llanto de lagrimas los cuales se dieron hasta su alcoba , donde allí se encerró sin responder a ninguno de los llamados que le hacían sus empleados, quienes angustiados se preocuparon por su estado de ánimo.

Ya era tarde de la Noche y Teresa no sabía qué hacer si llamar a sus patrones, pues ambos estaban fuera de la ciudad o sencillamente esperar al día siguiente. Así que opto por la segunda opcion puesto que no quería hacer que sus jefes pasaran un mal rato por algo que quizás no tendría importancia, pero que de una u otra manera le concernía.


Sofía, era una chica muy atenta, buena amiga, buena “onda”, la cual servía a los demás con agrado desde que estuviera a su alcance. Su distinción en su personalidad era un modo de ser muy extrovertida, por lo que su madre mucha de las veces le daba “lora” por su actuar, y a eso se complementaba el ser “confianzuda” por lo que también muchos de los hombres malinterpretaban, proponiéndole cosas indecentes, cosas de las cuales Sofía repudiaba, pues ante todo siempre estaba su integridad física, mental, emocional y espiritual.

Al día siguiente Sofía se levanto temprano, preparó su desayuno porque tenía una entrevista de trabajo, se vistió con ropa clásica, su bolso como fiel compañero de todas las mujeres no lo dejo atrás. Iba saliendo de su casa cuando una voz irrumpió en sus oídos.

- Sofía, espera échame un “aventón” hasta la Avenida-

sábado, 26 de diciembre de 2009

Sus padres eran dos exitosos personajes, reconocidos a nivel social como una familia digna de admirar, su estrato no los hacían volubles al orgullo, por el contrario la humildad era una característica y cualidad de la familia “Castaño Abril”.

La señora Adriana Abril, era una mujer de 40 años de edad, su estatura 1.68 cm, con una postura un poco robusta pero elegante, con sus venturosas y deseables curvas femeninas como característica de las doncellas, ojos color negro y una cara preciosa, bien definida, con labios muy llamativos los cuales seducían a cualquiera a un deseoso beso, su piel trigueña la hacía perfecta para ser que muchos la apetecieran a su lado. Se dedicaba al más hermoso de los artes, era escritora, su especialidad novelista, además de eso practicaba y también le apasionaba mucho la poesía. Era una de las más importantes novelistas a nivel nacional.

Por su parte el Señor “Max Castaño” era un controvertido profesor de Abogacía en una de las más importantes universidades de la Región, de una edad juvenil, según él, 44 años, un hombre alto, 1.80 cm, cuerpo atlético, con una mirada que pareciera que hablara a través de ella, era estricto y rígido en sus clases, pero daba la confianza para que ninguno quedará con duda o incógnita alguna.

miércoles, 23 de diciembre de 2009

Sofía tenía una edad bastante codiciosa y envidiable, 23 años, era Psicóloga y abogada, dos profesiones para ser bastante joven, por lo cual pocos creían a su alcance. Sofía había salido de de la educación básica de 15 años, puesto que sus padres siempre se empeñaron en inculcarle el amor al estudio, siendo un futuro seguro que garantizaría el avance y cumplimiento en sus diferentes propósitos. Después de salir del “colegio” comenzó sus estudios superiores, impresionando a profesores y compañeros, por su amplia capacidad intelectual a su corta edad, siempre forjando sus propias ideas, con razón y justificación, dejaba al mas “pillo” con la boca cerrada, se destacó en cada evento que hacia su facultad en pro del beneficio ciudadano, comunitario y universitario. Comenzó Abogacía primero y a la mitad de esta carrera quiso retarse a sí misma, proponiéndose estudiar psicología a distancia, era bastante duro, pero era un reto, un reto del cual no se iba a dejar vencer, sus padres accedieron pero con muchos reproches, en fin, lo que importaba era que su única hija, Sofía, fuera feliz…

lunes, 21 de diciembre de 2009

Parte I

En la tarde de un día radiante, Caminaba ligeramente por el puerto principal una hermosa mujer, belleza incomparable, que quienes la miraban le seguían con la vista hasta perderla en la masa de la gente, su nombre “SOFÍA”. Sofía, mujer delgada, alta de 1.72 cm, con cuerpo de una ninfa, alguna ninfa griega, cuya hermosura traspasaba los límites de la deidad, sus curvas impresionaban a cualquiera, hombre o mujer, perfecta cintura que pareciera que un pintor se hubiese esmerado en hacer tan delicada obra de arte, su cabello hasta la cintura daba fe de lo femenina que era, sus ojos cafés claros impactaban con una penetrante y coqueta mirada. Su piel dócil, suave y deseable hacia que atrajera a aquel que rozara con ella solo una pequeña fracción de cutis. Algo que también impresionaba a quien por casualidad cruzaba su vista con aquella dama era su vestir, simplemente enternecía y daba que decir imponiendo su propia moda, dejándose llevar por sus gustos y su “sentirse bien”, faldas, shorts, pantalones, licras, etc. Hacían parte de su closet; botas, zuecos, saldalías altas o bajas, cerradas, con correas eran el complemento para su estilo de vida.
Así era Sofía, una mujer que no podía pasar desapercibida por la multitud.

viernes, 4 de diciembre de 2009

Presentacion...

Villavicencio, ciudad bonita, donde el esplendor del llano y su naturaleza reinan, allí en el “pie de monte llanero”, donde nacen grandes amaneceres, que impresionan a cualquier turista o residente, allí donde a lo largo del día se detallan paisajes privilegiados creados solo por el Todo Poderoso, allí donde los atardeceres hablan a parejas enamoradas, allí es donde la naturaleza y su entorno nos impregna de su magia.
Es allí donde se desarrollara nuestra historia..."Sofia"

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